Castillo Fadrella o Castell Vell
En la colina de Fadrell, al norte de la ciudad, se encuentra el Castillo Fadrella, el monumento histórico más antiguo e importante de Castellón. Es una fortaleza de origen medieval, que ha sido testigo y protagonista de muchos eventos y cambios que han moldeado la ciudad.
El Castillo Fadrella fue construido en el siglo XI por los árabes, que gobernaban estas tierras. Su nombre proviene de la palabra árabe fath, que significaba victoria o conquista. El castillo era la residencia del gobernante de la alquería Fadrell, una de las muchas granjas que existían en la llanura. El castillo era un punto estratégico de defensa y observación, desde el cual se podía controlar toda la zona.
En el siglo XIII, el castillo fue conquistado por el rey Jaime I el Conquistador, quien subyugó estas tierras y fundó una nueva ciudad en la llanura. El castillo se convirtió entonces en propiedad real y sede del primer alcalde de la ciudad. En el siglo XIV, el castillo fue ampliado y fortificado para hacer frente a los ataques de piratas y rebeldes. En el siglo XV, el castillo fue entregado a la Orden de Montesa, que lo administró hasta el siglo XIX.
En los siglos siguientes, el castillo perdió su importancia y función, y también sufrió un deterioro y olvido gradual. En el siglo XIX, el castillo fue vendido a propietarios privados, que lo utilizaron como cantera y almacén. En el siglo XX, el castillo fue recuperado por la ciudad y sometido a trabajos de renovación y conservación. En el siglo XXI, el castillo fue abierto al público y se convirtió en una atracción turística y cultural.
Hoy en día, el Castillo Fadrella es un conjunto arquitectónico compuesto por murallas defensivas, una torre, una puerta, un patio, una capilla, un palacio y una torre. En las murallas defensivas se pueden ver los escudos reales y de la orden, que dan testimonio de su historia. En la torre hay un pequeño museo donde se pueden ver objetos relacionados con la vida y la actividad del castillo. En la puerta hay una placa conmemorativa de la conquista de la ciudad por Jaime I. En el patio hay un pozo que abastecía de agua al castillo. En la capilla hay un altar con una imagen de la Virgen de Loreto, patrona de la ciudad. En el palacio hay salas donde se celebraban reuniones y ceremonias. En la torre hay un mirador desde el que se puede disfrutar de una magnífica vista de la ciudad y sus alrededores.
No es solo un monumento, sino también un museo. En el castillo se puede visitar una exposición dedicada a la historia de la ciudad, donde se pueden ver mapas, documentos, fotografías y maquetas que muestran su evolución y cambios. En el castillo también se puede ver una exposición dedicada a la arqueología, donde se pueden ver hallazgos de diferentes épocas y culturas, que dan testimonio de la riqueza y diversidad del patrimonio de Castellón.
También es un centro cultural. En el castillo se celebran diversos eventos e iniciativas, como conciertos, espectáculos, talleres, juegos y visitas, que tienen como objetivo promover y difundir valores históricos, culturales y educativos.
