Puente de piedra de origen Medieval en Soria
El Puente de piedra de origen Medieval es un puente de piedra que conecta ambos lados del río Duero, a la altura del casco antiguo de Soria. Es uno de los puentes más antiguos y característicos de España, con más de 800 años de historia. Su construcción comenzó en el siglo XII, durante el reinado de Alfonso VIII, y continuó hasta el siglo XIV, cuando se completó. El puente tiene un total de 11 arcos, 9 de los cuales son originales y 2 se añadieron más tarde. El puente tiene una longitud de 140 metros y una anchura de 6 metros, y está destinado tanto al tráfico peatonal como al vehicular.
El puente ha sido testigo de muchos eventos y leyendas relacionadas con la ciudad de Soria. Aquí se llevaron a cabo batallas y asedios durante las guerras con los musulmanes, los franceses y los carlistas. Aquí también pasaban las procesiones y ceremonias religiosas, como la fiesta de San Saturio, patrón de la ciudad, o la fiesta de San Juan, la fiesta popular más importante. Aquí también tuvieron lugar escenas de la vida y obra de famosos escritores, como Antonio Machado, Gustavo Adolfo Bécquer o Gerardo Diego, quienes inmortalizaron el puente en sus poemas y relatos.
Una de las leyendas más conocidas relacionadas con el puente es la del “Salto del Caballo”. Cuenta que en 1521, durante la guerra de los comuneros, las tropas imperiales de Carlos V sitiaban la ciudad de Soria, que se defendía valientemente. Entonces, uno de los defensores, Diego Laínez, decidió realizar una hazaña audaz para levantar la moral de sus compañeros. Montó a caballo y saltó desde el puente al río, superando más de 20 metros de altura. Luego, salió del agua y regresó a la ciudad, donde fue recibido con vítores.
Su hazaña fue tan admirada que fue reconocido como un héroe y recibió el apodo de “Salto del Caballo”. En el puente hay una placa conmemorativa de este hecho, así como una escultura de un caballo saltando, obra del escultor Jesús Trapero de 2005.
El puente está abierto a los visitantes durante todo el año, y la entrada es gratuita. Sin duda, es uno de los lugares que vale la pena visitar para admirar la hermosa vista del río y la ciudad.
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