Iglesia de San Pedro en Cuenca

La iglesia de San Pedro en Cuenca es uno de los monumentos más antiguos de Cuenca, que conserva muchas huellas de su larga y turbulenta historia. Su origen se remonta a la época árabe, cuando en este lugar había una mezquita, que fue destruida por las tropas cristianas bajo el mando de Alfonso VIII en 1177. Poco después, sobre sus cimientos, se empezó a construir una nueva iglesia, que debía ser un símbolo de victoria y fe.

La iglesia fue inicialmente de estilo románico, con tres naves y torre en la fachada, pero en los siglos siguientes fue varias veces reformada y ampliada, adoptando elementos góticos, barrocos y neoclásicos. Fue también escenario de importantes acontecimientos políticos y religiosos, como las luchas entre la aristocracia y el clero en el siglo XV, la defensa de la ciudad ante las tropas de Carlos I en el siglo XVI, o las ceremonias relacionadas con la canonización de San Julián de Cuenca en el siglo XVII.

El interior de la iglesia es rico en obras de arte, que testimonian su significado y prestigio. Entre ellas destaca el altar mayor, que es obra de José Camarón, uno de los más destacados pintores españoles del siglo XVIII. El altar representa la escena de la coronación de la Virgen del Carmen por los ángeles y los santos, entre los que se encuentra San Nicolás, patrón de la iglesia. La pintura está realizada en estilo rococó, con una rica paleta de colores y una dinámica composición.

En el altar lateral, a la derecha de la nave, se puede ver otro excelente cuadro, de Francisco Bayeu, hermano del famoso Francisco Goya. El cuadro muestra la escena de la Anunciación, en la que el ángel Gabriel anuncia a María que concebirá al Hijo de Dios. La pintura está hecha en estilo neoclásico, con sencillez y armonía de formas y colores.

En la iglesia también se encuentran las tumbas de muchas personalidades de la historia de Cuenca, como Diego Hurtado de Mendoza, marqués de Cañete, que fue uno de los más poderosos y polémicos aristócratas del siglo XV, o Lope de Barrientos, obispo de Cuenca, que fue uno de los más influyentes y eruditos eclesiásticos del siglo XV.